El salario medio bruto de los empleados españoles se situó en 2018 en 22.819 euros, el de los mandos intermedios en 41.507 y el de los directivos en 81.059. Tanto directivos como mandos consiguen aumentar su retribución en cerca del 2,5%, mientras que los empleados quedan prácticamente igual que el año anterior. Los datos se desprenden del duodécimo informe anual “Evolución Salarial 2007-2018”, presentado hoy conjuntamente por la consultora ICSA Grupo y EADA Business School.
Según el autor del Informe, Ernesto Poveda, presidente de ICSA Grupo, los directivos y mandos intermedios se han visto beneficiados de la retribución variable la cual ha mejorado fruto de la bonanza económica. Por otro lado, los empleados aun no gozan de modelos de retribución variable.